Cuando entré en Traducción e Interpretación en la Autónoma de Barcelona decidí que en 3º me iba a ir de Erasmus a Alemania, típica decisión que tomas con un café en mano y delante de los apuntes de alemán de 1º. Nunca pensé que todo iba a pasar tan rápido...y, sin embargo, aquí estoy: haciendo las maletas un 31 de agosto cualquiera.
¿Y por qué un blog a estas alturas? Sencillo, porque sí (y porque voy a estar un año fuera del país, seguramente con mucho tiempo libre para echar de menos un poco de todo). Y dicho sea de paso, así seréis testigos de cómo me iré adaptando a este mundillo que llaman Erasmus.
En fin, por hoy poco más. Mañana empiezan a encenderse los motores. Primera parada: Múnich.
¡Saludos!